Cinceles para esquinas - Perfeccione su trabajo o simplemente trabaje más rápido
La herramienta más sencilla que tenemos en nuestro taller ha existido desde el principio de la artesanía y sigue siendo tan relevante como siempre, incluso con el avance de la tecnología en las herramientas. Esta sencilla pieza de acero y mango de madera es el cincel.
Los cinceles no son difíciles de aprender, pero sí de dominar. Utilizar un cincel en distintos tipos de madera, aprender en qué dirección utilizarlo según la veta de la madera, cómo mantener el filo afilado... son factores que, cuando se dominan, permiten perfeccionar las funciones del cincel.
Aunque los cinceles existen desde hace siglos, se han hecho muchos avances en su desarrollo y funciones. Desde los materiales utilizados para la hoja hasta la forma del mango, pasando por las formas y tamaños especiales de las hojas, los cinceles actuales dejarían absolutamente boquiabierto a un trabajador de la madera del siglo XVI. Sin embargo, a pesar de todos sus avances, seguiría siendo capaz de reconocer la herramienta.
Todos sabemos que cada herramienta tiene su uso específico. Al igual que un destornillador de cabeza plana se desarrolló para el tornillo de cabeza plana, cada cincel también tiene su propia función. Cada desarrollo se creó para resolver un problema o hacer una tarea más fácil y exacta. Por ejemplo, podemos verlo con el desarrollo de los cinceles angulares. Un cincel para esquinas corta fácilmente esquinas de 90 grados para colocar bisagras. Simplemente alineando los bordes rectos del corte y golpeando el borde con un martillo, se puede conseguir una esquina de 90 grados perfecta con un borde limpio, nítido y recto; convierte su esquina redondeada en una esquina cuadrada y limpia.
Este avance es importante para dos tipos de carpinteros. En primer lugar, el principiante con los cinceles que aún no ha alcanzado el nivel suficiente para lograr una esquina limpia perfecta de 90 grados con cinceles de banco. En segundo lugar, el carpintero experto que puede cortar estas esquinas perfectamente con cinceles de banco pero decide no hacerlo para acelerar su trabajo sin comprometer los resultados.
Cuando se montan bisagras, a menudo se necesita una esquina perfecta de 90 grados para colocar una bisagra de fábrica sin errores. Suele ser un proceso largo de marcar y cortar. Utilizar un cincel para esquinas es una forma más sencilla de perfeccionarla sin errores.
Si observa la imagen siguiente, verá que sólo hay que alinear el cincel angular, colocar la fresa en la posición adecuada y golpearla ligeramente con un mazo. Esta tarea puede llevar mucho tiempo cuando hay que colgar varias puertas y cortar numerosas bisagras encajadas. Por lo tanto, si busca resultados uniformes y perfectos en una fracción de tiempo, aproveche esta herramienta sencilla y asequible.
Aunque los cinceles son una de las herramientas más básicas, que llevan siglos en nuestros talleres, y han visto muchos avances en su uso y tecnología, siguen manteniendo su sencillez. Como con cualquier herramienta, no solo debemos buscar calidad, sino algo que nos permita trabajar más rápido, mejor, de forma más inteligente y eficiente.